Basura espacial: amenaza cercana
“Actuar en el futuro estando en el presenteacorta las brechas heredadas del pasado”Abel Pérez Rojas
Recientemente la Agencia Espacial Europea (AEE) alertó al mundo sobre el creciente aumento de la basura espacial, esto pareciera que no tiene ninguna relación con la vida cotidiana, sin embargo existe un mayor vínculo del que parece a simple vista.
La basura espacial o chatarra espacial es el conjunto de desechos derivados de las misiones espacialesde los seres humanos. La basura espacial puede ser tan diminuta como polvo de pintura, tornillos, fragmentos de cable, etc., hasta satélites íntegros obsoletos, restos propulsores de naves o en un futuro estaciones completas.
Se calcula que alrededor del planeta hay aproximadamente 6500 toneladas de desechos y casi 23000 objetos mayores de 10 centímetros.
El peligro de la basura espacial no radica en el tamaño de los residuos sino en la velocidad (25000 km/hr.) que alcanzan debido a la combinación de las fuerzas gravitatoria y de ingravidez.
La basura espacial son “balas” que amenazan la entereza de satélites y naves espaciales, los primeros vitales para la transmisión de señales de televisión, telefonía móvil, internet, detección de fenómenos metereológicos, control de armas de destrucción masiva, etc. Las segundas son indispensables comomedio de transportación. En un extraño fenómeno llamado Síndrome de Kessler, la basura espacial provoca más basura de ese tipo.
De 1991 a la fecha se tienen registradas tres colisiones ocasionadas por la basura espacial y es tal su presencia que recreaciones por computadora han formado “anillos” de restos en torno a la Tierra.
Actualmente, las colisiones de la basura espacial ponen en peligro directamente muy pocas vidas y los daños principales son indirectos y económicos, sin embargo en el futuro a corto plazo las cosas podrían cambiar, tal es el caso del turismo espacial.
Una vez que los viajes al espacio exterior han dejado la etapa de exploración, la explotación comercial ha iniciado una carrera que en breve será de lo más normal.
En el año 2001 Dennis Tito se convirtió en el primer turista espacial de la historia, seguido por Mark Shuttleworth (2002), Gregory Olsen (2005), Anousheh Ansari (2006), la lista de turistas espaciales sigue creciendo, se cree que en la próxima década los viajes al espacio serán como tomar un crucero por cualquier mar.
En la expansión del turismo espacial hay propuestas que pretenden hacer de Quintana Roo, en cinco años, un puerto espacial que complemente la oferta de esparcimiento dirigida al mercado internacional.
Si el proyecto mexicano parece tomado de la ciencia ficción habrá que revisar los avances que acortan la brecha entre desarrollo tecnológico y el mercado del ocio sideral, entre otros, de las empresas Virgin Galactic (EEUU), Obayashi (Japón), Bru&Bru (España) y el progreso de la Organización Internacional de Turismo Espacial (ISTA) con sede en la Haya.
En resumen, la basura espacial está creciendo sin control poniendo en riesgo la integridad de contados viajeros, satélites, naves y bases espaciales; con la inminente explosión turística y popularización de los viajes espaciales, la basura espacial en el corto plazo y mediano plazo representa una seria amenaza a la vida de muchas personas y al éxito de futuras misiones galácticas.
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