El Paquete Económico
de 2016
09:22 AM
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Si usted cree que la reforma fiscal instrumentada en 2014 va a ser borrada con la propuesta del Paquete Económico que se envíe al Congreso el 8 de septiembre, está equivocado.
Pero si cree que no habrá ninguna modificación en el esquema fiscal vigente, también está equivocado.
Desde hace bastantes semanas, representantes del sector privado trabajan con funcionarios de la Secretaría de Hacienda para tratar de llegar a un esquema que permita por una parte generar incentivos reales para la inversión, el empleo y el ahorro de largo plazo, y por otra mantener la disciplina de las finanzas públicas que permita que, como se preveía, el déficit público sin inversión de Pemex y CFE sea de 0.5 por ciento del PIB o de 3.0 por ciento con inversión y proyectos de alto impacto.
Obviamente, si tuviéramos un precio del petróleo de 100 dólares y una economía que creciera a 4.0 por ciento, los márgenes de maniobra para conciliar ambos propósitos serían más amplios.
Lo que ha sucedido es que habrá que buscar este esquema con más detalle y cuidado, tanto en el propio Paquete que se enviará dentro de una semana exactamente, como en el Congreso, que habrá de discutirlo a partir de entonces.
Si usted me preguntara cuál debe ser el objetivo prioritario en este momento, sin ninguna duda le diría que el que nos asegure transitar con el menor costo posible por un entorno internacional lleno de riesgos y volatilidad.
El objetivo de ello será conseguir que se mantenga la capacidad de elevar el crecimiento de la economía y el bienestar de la gente en el mediano y largo plazos.
Creo que, sobre la base de un esfuerzo de eficiencia y una revisión meticulosa de los impactos fiscales, pese al entorno, es factible encontrar algunos elementos para incentivar la inversión y el empleo.
Un ejemplo de las tremendas dificultades del entorno internacional lo ofreció hace unos días Brasil.
Mientras aquí nos sorprendemos por una reducción de la tasa esperada del PIB en este año a un nivel de poco más de 2.0 por ciento, los brasileños acumulan su segundo trimestre consecutivo con una caída del PIB. En el primer trimestre cayó 0.7 por ciento; en el segundo 1.9 por ciento y las estimaciones para el cierre del año ubican la caída en 2.25 por ciento seguida de otro descenso de 0.4 por ciento en 2016.
No refiero las cifras como consuelo sino como una imagen de lo que podría estar sucediendo en el caso de que tuviéramos desequilibrios serios en las finanzas públicas, exportaciones concentradas en materias primas y alta dependencia a la dinámica de la economía china.
Es políticamente incorrecto decirlo y se lleva uno una buena cantidad de mentadas, pero es mejor sacrificar crecimiento en el corto plazo si esto implica mantener orden en medio de los sube y baja de las variables financieras y apuntarle a crear las condiciones que van a permitir crecer más en el mediano plazo.
Pero, con todo y resultados muy medianos en este año, la primera mitad de este sexenio será la de mayor crecimiento de los últimos tres.
Eso nos dice que precisamente hay que trabajar en mejorar nuestro potencial de crecimiento para el largo plazo.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/el-paquete-economico-de-2016.html
¿Malbarata las reservas el Banco de México?
27.08.2015
Desde el 1 de julio y hasta el día de ayer, el Banco de México ha subastado seis mil 677 millones de dólares a través de los dos mecanismos de subastas que tiene.
Un monto de mil 109 millones de dólares se han subastado al elevarse el valor del dólar en más de juno por ciento diario, mientras que los otros cinco mil 568 millones se han vendido en el marco de las subastas sin precio mínimo.
Respecto a estas subastas se ha dicho que “malbaratan” las reservas o que “esfuman” los dólares.
Entre el último día de junio y el dato más reciente, las reservas internacionales han bajado de 192 mil 403 millones de dólares al final de junio a 187 mil 333 millones al 21 de agosto, es decir, hay una caída de cinco mil 70 millones.
Respecto a este proceso, lo primero que hay que entender es que la variación de las reservas internacionales no modifica el balance del Banco de México, sino sólo produce un cambio en la composición de sus activos.
Imagine que usted tiene ahorros en dólares pero también en pesos. Si, en cierto momento, usted vende sus dólares y los pesos que obtiene en esa venta los deposita en su cuenta en pesos, no está reduciendo sus ahorros sino sólo modificando su estructura. Lejos de “malbaratar” las reservas, cuando el Banxico hace este tipo de operaciones tiende a hacer muy buen negocio.
El Banxico acumuló reservas cuando el valor del dólar era de menos de 14 o incluso de 13 pesos, y ahora vende dólares arriba de 17. Si eso es malbaratar las reservas… no sé lo que sea venderlas bien.
Esto ha sido tan favorable para Banxico que en el primer semestre del año su resultado financiero arroja una utilidad de 139 mil millones de pesos.
Hay que recordar que el año pasado el Banxico generó un remanente de operación de 31 mil 449 millones de pesos que fue entregado a Hacienda y que implicó una entrada adicional nada despreciable.
Para 2016, si las cosas siguen como ahora, la venta de reservas del Banxico será un negocio en el que no sólo ganará Hacienda, sino también el gobierno y probablemente sea un amortiguador de los menores ingresos petroleros que seguramente tendremos ese año.
Hay quien cuestiona la venta de dólares de Banxico por el hecho de que ese tipo de operaciones no detiene el encarecimiento de la divisa norteamericana. ¿Y quién dijo que el propósito era detener el encarecimiento del dólar?
El propósito es proveer de liquidez al mercado e impedir que operaciones de bajo volumen puedan impactar en el precio del dólar por falta de liquidez.
Pero, si resulta que el alza del dólar deriva de operaciones de decenas de miles de millones de dólares, obviamente las subastas no van a hacerles ni cosquillas, lo que no pretenden.
Si el Banco de México de verdad quisiera influir en la paridad, el mejor instrumento es la tasa de interés.
Sigo creyendo que mientras la devaluación no se traduzca en inflación o en salida de capitales, el Banco Central se va a reservar el uso de ese instrumento.
¿Lo usará en septiembre? Creo que aún está por verse. Va a depender del ambiente general y de lo que haga la Fed.
No se hagan ilusiones, seguirá la volatilidad
26.08.2015 Respondemos algunas preguntas que nos hicieron llegar ayer los lectores.
1.– ¿Marca la baja de las tasas en China un cambio de tendencia en la inestabilidad financiera?
Me temo que no. La baja de un cuarto de punto en las tasas en China generó un respiro de sólo unas horas, pero no cambió nada esencial. Se trata de la quinta baja desde noviembre pasado, que ha llevado a la tasa de 6.0 a 4.6 por ciento. Es clara la señal de que las autoridades chinas pretenden incentivar el crédito y por esto también bajaron el porcentaje de reservas respecto a depósitos bancarios de 18.50 a 18 por ciento. Sin embargo, esas medidas no serán suficientes para cambiar la tendencia de la actividad económica.
2.– ¿Qué podemos esperar que ocurra con las bolsas de valores?
Tras la oleada de ventas que provocó la caída mundial de días pasados reflejada en un retroceso de 9.5 por ciento en el índice Global Dow entre el 17 y el 24 de agosto, se generaron oportunidades de compra que se aprovecharon ayer por la mañana. Pero hacia medio día las bolsas de Estados Unidos ya iban otra vez para abajo. Al final, el Global Dow cayó marginalmente ayer 0.15 por ciento. Es previsible que el mercado de Shanghái continúe en descenso en los próximos días y también que se repita el contagio que vimos en días pasados a los mercados de valores del mundo, no sabemos en qué grado. No hay que olvidar que pese a las impresionantes caídas de las últimas semanas, el índice de Shanghái, al cierre del martes, todavía estaba 33.5 por ciento por arriba del nivel que tenía hace un año.
3.– ¿Cambiará la tendencia del peso frente al dólar?
No es probable. En la medida que persisten tanto la incertidumbre respecto al incremento de las tasas de interés en EU y de la suerte de la economía china, es probable que sigamos teniendo alzas y bajas de la cotización, pero manteniéndose un dólar caro. De acuerdo con Bloomberg, hay sólo un 26 por ciento de probabilidades de que el alza de tasas ocurra en septiembre. Tras los acontecimientos en China, se ha reducido esta posibilidad, que apenas el 7 de agosto se valoraba en 54 por ciento. Alguna vez le mencioné que habría 28 días de sobresaltos. Me temo que podrían ser más.
4.– ¿Cuál es el fondo del problema en China?
En realidad son dos en lo esencial. El primero es la complicada transición de una economía que dependía de las exportaciones y la inversión a otra que depende más del consumo interno. El salto está siendo muy complicado y eso ha bajado el crecimiento, con todas sus implicaciones. Lo segundo es que a veces imaginamos que la economía china es de mercado, como lo son las del occidente. La realidad es que hay mercados intervenidos, con una autoridad cuyas acciones oscilan a veces entre el deseo de dejarlos en libertad y en otras de sujetarlos para ajustarlos a lo que el gobierno quiere. En ese jaloneo, lo menos que provocan es incertidumbre. No se sabe al final de cuentas qué quieren hacer.
Quisiera decirle que la inestabilidad ha terminado. Lo lamento, no es así.
Nos falta un tramo largo en el que habrá que navegar con ella.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/no-se-hagan-ilusiones-seguira-la-volatilidad.htm
YAKARTA.- La reciente volatilidad en los mercados financieros globales ha revelado la rapidez con la que los riesgos pueden extenderse de una economía a otra, dijo la directora del Fondo Monetario Internacional(FMI) en Yakarta.
"Lo que se ha demostrado en las últimas semanas es cuánto se encuentra Asia en el centro de la economía mundial y cuánta perturbación en un mercado asiático puede extenderse al resto del mundo", dijo Christine Lagarde en una conferencia en la capital de Indonesia.
Lagarde dijo que la economía mundial se enfrenta a vientos en contra ocasionados por un reajuste en China, el crecimiento ralentizado de Japón, la caída en los precios de las materias primas y la incertidumbre que rodea un incremento en las tasas de interés en Estados Unidos.
Las políticas deben ser adaptadas a cada país, dijo Lagarde, pero sobre todo deberían implicar el fortalecimiento de las defensas con una política fiscal prudente, frenar la expansión excesiva del crédito, la alineación de los tipos de cambio para actuar como amortiguadores y el mantenimiento de reservas de divisas suficientes.
"Las autoridades y los supervisores tienen que permanecer constantemente vigilantes sobre todo cuando existen estos productos nuevos e innovadores (...) estos riesgos tienen que estar bajo la vigilancia de los supervisores, ya sea en la banca tradicional, en los sistemas bancarios perturbadores o en los sistemas bancarios informales", dijo Lagarde.
http://www.elfinanciero.com.mx/financial-times/por-que-las-preocupaciones-sobre-china-tienen-sentido.html
Por qué las preocupaciones sobre China tienen sentido
El mercado chino no es un mercado normal. Incluso más que en la mayoría de los mercados, se trata de un casino en el que cada jugador espera encontrar un “tonto mayor” en quien descargar las fichas costosas antes de que sea demasiado tarde.
No soy ni lo suficientemente inteligente como para entender el comportamiento del “Sr. Mercado” — el maníaco-depresivo creado por el gurú de la inversión, Benjamin Graham — ni tan increíblemente tonto como para creer que sí lo entiendo. Pero hay que admitir que sin duda él ha estado pasando por una fase depresiva. Detrás de todo esto parecen estar las preocupaciones sobre China. ¿Tiene razón de estar nervioso el “Sr. Mercado”?. En realidad, sí.
Hay que distinguir entre de qué vale la pena preocuparse y de qué no. La caída del mercado de valores de China se encuentra en la segunda categoría. De lo que vale la pena preocuparse es la magnitud de la tarea que confrontan las autoridades chinas contra su aparente incapacidad para lidiar adecuadamente con la ruptura de una simple burbuja bursátil.
Los mercados de valores de hecho se han estado corrigiendo, con el mercado de China a la cabeza. Entre su punto máximo en junio y el martes, el índice de Shanghái cayó un 43 por ciento. Sin embargo, el mercado de valores de China sigue estando un 50 por ciento más alto que a principios de 2014. La implosión de la segunda burbuja bursátilchina en una década todavía parece inacabada.
El mercado chino no es un mercado normal. Incluso más que en la mayoría de los mercados, se trata de un casino en el que cada jugador espera encontrar un “tonto mayor” en quien descargar las fichas costosas antes de que sea demasiado tarde. Un mercado como éste está destinado a ser extremadamente volátil. Pero sus caprichos debieran revelar poco acerca de la economía china en general.
Sin embargo, los acontecimientos en el mercado chino tienen un más amplio significado observable en dos maneras relacionadas. Una es que las autoridades chinas decidieron arriesgar sustanciales recursos e incluso su autoridad política en su esfuerzo (fracasado, como era de esperarse) para detener el colapso de la burbuja. La otra es que deben haber sido impulsados por la preocupación acerca de la economía. Si ellos están lo suficientemente preocupados como para apostar en tan leve esperanza, nosotros también debiéramos preocuparnos.
Tampoco se trata de la única manera en la que el comportamiento de las autoridades chinas es motivo de preocupación. La otra fue la decisión de devaluar el renminbi el 11 de agosto. En sí, esto también es un evento sin importancia, representando una devaluación acumulada frente al dólar estadounidense de apenas 2.8 por ciento hasta el momento. Pero tiene implicaciones significativas.
Las autoridades chinas quieren espacio para recortar las tasas de interés, como ocurrió el martes. Una vez más, este hecho subraya su preocupación acerca de la solidez de la economía. Otra posible consecuencia es que Beijing pudiera buscar una reactivación del crecimiento impulsado por las exportaciones. Me parece difícil de creer, ya que las consecuencias globales serían devastadoras. Pero al menos es razonable preocuparse por esta desestabilizadora posibilidad. Una última implicación posible es que las autoridades chinas se están preparando para tolerar la fuga de capitales. Si es así, EEUU caería en su propia trampa. Washington ha tratado de lograr la liberalización de las cuentas de capital chinas. Tendría entonces que tolerar una desestabilizadora consecuencia a corto plazo: un debilitamiento del renminbi.
Los recientes acontecimientos deben considerarse dentro del contexto de una preocupación mayor. La cuestión es si las autoridades chinas pueden obtener y asegurar un desplazamiento de una economía liderada por la inversión a una dominada por el consumo, a la vez que mantienen la demanda agregada. Si pueden, la economía también mantendrá un crecimiento de entre 6 y 7 por ciento.
Si no pueden, existe la amenaza de una inestabilidad económica y política.
La economía de China ya se ha ralentizado. El hablar de una “nueva normalidad” reconoce esta realidad. Pero Consensus Economics ha obtenido pronósticos de crecimiento alternativos. La media de estos nuevos pronósticos muestra un crecimiento de sólo 5.3 por ciento durante el año hasta el cuarto trimestre de 2015.
Supongamos que algo como esto fuera cierto. Según las cifras oficiales, la inversión fija bruta fue del 44 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2014.
Es más probable que las cifras de inversión estén correctas en comparación con las del PIB. Pero ¿tiene sentido económico que una economía invierta el 44 por ciento del PIB y aún crezca a sólo un 5 por ciento? No. Estos datos sugieren rendimientos marginales ultra bajos, si no negativos. Si éste es el caso, la inversión pudiera caer pronunciadamente. Eso pudiera no reducir el potencial de crecimiento, siempre y cuando se eliminara primero la inversión ineficiente. Pero pudiera ocasionar un colapso de la demanda. Todo lo que las autoridades chinas han hecho hasta ahora sugiere que están preocupados principalmente por eso.
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